México, 31 de enero de 2022.- El presidente Andrés Manuel López Obrador, afirmó que «en este gobierno no tienen influencia mis hijos».
Así el presidente atajó las críticas por el reportaje publicado la semana pasada sobre la residencia en Houston, Texas, en la cual vive su hijo mayor José Ramón López Beltrán.
López Obrador reiteró: «No se les da contratos a ningún recomendado. En el asunto del matrimonio (de José Ramón) pues ahí está complicado meterse, ellos se casaron y al parecer la señora tiene dinero».
Insistió que «no somos iguales».
A sus adversarios políticos les aseguró que no tiene apego al poder ni le interesa el dinero.
Recalcó que su honestidad es lo que más estima en la vida.
«Acerca de nuestra honestidad, repetirles a nuestros adversarios qué es lo que estimo más importante en mi vida, que no me importa, no me interesa el dinero y que tampoco tengo tanto apego por el poder, que el poder es humildad y el poder es poder decir adiós en su momento», señaló.
Advirtió a sus opositores que seguirá hacia adelante con la Cuarta Transformación de la vida pública del país.
«Entonces vamos adelante a la transformación de México, aunque no les guste a los que se sentían dueños de México y a la prensa vendida o alquilada y a los intelectuales orgánicos, alcahuetes del régimen de corrupción, vamos adelante con el pueblo, con todos, pero confiando mucho en la lealtad del pueblo», dijo.
Manifestó que está en contra de los empresarios que han hecho su riqueza de forma mal habida y a base de corrupción.
«No todo el que tiene es malvado, hay quien ha hecho su patrimonio con esfuerzo, con trabajo, de conformidad con la ley y merece respeto, yo estoy en contra de la riqueza mal habida, me molesta la corrupción, me indigna la corrupción», señaló.