Seúl, Corea del Sur, 12 de mayo de 2022 (AP).— Corea del Norte impuso el jueves un confinamiento nacional para controlar su primer brote reconocido de COVID-19 después de mantener durante más de dos años una afirmación muy cuestionada de un historial perfecto.
El brote obligó al líder Kim Jong Un a usar una máscara en público, probablemente por primera vez desde el comienzo de la pandemia, pero la escala de transmisiones dentro de Corea del Norte no se conoció de inmediato.
El hecho de no frenar las infecciones podría tener graves consecuencias porque el país tiene un sistema de atención médica deficiente y se cree que sus 26 millones de habitantes en su mayoría no están vacunados.
Algunos expertos dicen que Corea del Norte, por su rara admisión de un brote, puede estar buscando ayuda externa.
Sin embargo, horas después de que Corea del Norte confirmara el brote, el ejército de Corea del Sur dijo que detectó que el Norte había disparado tres presuntos misiles balísticos hacia el mar.
Fue su ronda número 16 de lanzamientos de misiles este año, con una política arriesgada destinada a obligar a Estados Unidos a aceptar a Corea del Norte como potencia nuclear y negociar el alivio de las sanciones y otras concesiones desde una posición de fuerza.
En respuesta, Kim pidió en una reunión del Politburó del partido gobernante un cierre completo de ciudades y condados y dijo que las unidades deberían aislar los lugares de trabajo para bloquear la propagación del virus.
Instó a los trabajadores de la salud a intensificar los esfuerzos de desinfección en los lugares de trabajo y los hogares y movilizar suministros médicos de reserva.
Kim dijo que era crucial controlar las transmisiones y eliminar la fuente de infección lo más rápido posible, al mismo tiempo que se aliviaban los inconvenientes para el público causados por los controles del virus.
Insistió en que el país superará el brote porque su gobierno y su pueblo están “unidos como uno solo”.
A pesar de la elevada respuesta al virus, Kim ordenó a los funcionarios que sigan adelante con la construcción programada, el desarrollo agrícola y otros proyectos estatales al tiempo que refuerzan la postura de defensa del país para evitar cualquier vacío de seguridad.
La televisión estatal de Corea del Norte mostró a Kim y a otros altos funcionarios con máscaras cuando ingresaban a una sala de reuniones, aunque Kim se quitó la máscara para hablar por un conjunto de micrófonos.
Fotografías fijas distribuidas por KNCA mostraban a Kim sin máscara y sentado en la cabecera de una mesa donde todos los demás funcionarios permanecían con máscara.
El Ministerio de Unificación de Corea del Sur, que maneja los asuntos intercoreanos, no pudo confirmar de inmediato si era la primera vez que los medios estatales mostraban a Kim usando una máscara desde el comienzo de la pandemia.
Kim se ha dirigido previamente a grandes multitudes sin cubrebocas y elogió la respuesta pandémica anterior del país, y su decisión de ser visto con un cubrebocas podría tener como objetivo aumentar la vigilancia pública.
Corea del Norte, que ha mantenido estrictos controles antivirus en sus fronteras durante más de dos años, no proporcionó más detalles sobre su nuevo bloqueo.
Pero un fotógrafo de Associated Press en el lado surcoreano de la frontera vio a docenas de personas trabajando en los campos o caminando por los senderos en una ciudad fronteriza de Corea del Norte, una indicación de que el cierre no requiere que las personas se queden en casa o exime el trabajo agrícola.