México, 30 de mayo de 2022 (EL PAÍS).- Tres de los cuatro peritajes externos contratados por la Fiscalía de Ciudad de México para analizar las causas del colapso de la Línea 12 del metro reportan fallas en el mantenimiento y la inspección de la estructura.
Los documentos, a los que ha tenido acceso EL PAÍS, destacan como causas del derrumbe problemas en el diseño de la obra y la construcción, pero apuntan a una inexistencia de revisiones de la línea, que debían realizarse de manera periódica, y deficiencias en el manual de mantenimiento, que no detallaba cómo tenían que hacerse esos controles.
En línea con el último informe de la consultora noruega Det Norske Veritas (DNV), los peritajes de la Fiscalía aseguran que no hay registro de que se haya hecho ninguna evaluación detallada de la obra desde su inauguración en 2012 hasta la caída del puente el 3 de mayo de 2021, que dejó 26 muertos y un centenar de heridos.
La investigación oficial expone también que los errores que llevaron al derrumbe “podían ser detectados con un manual de inspección y mantenimiento adecuado”, se lee en uno de los documentos.
La Fiscalía de Ciudad de México anunció el pasado octubre que había contratado a un grupo de “especialistas con amplio reconocimiento por su solidez y experiencia” para evaluar lo sucedido en la tragedia.
El Ministerio Público solicitó la ayuda de un experto en estructuras, uno en puentes, uno en geotecnia y otro en topografía fotogramétrica.
De acuerdo con la fiscal Ernestina Godoy, estos estudios se realizaron de forma independiente al análisis causa-raíz que hizo DNV, contratada por el Gobierno de Claudia Sheinbaum, y que dio a conocer este periódico el 9 de mayo.
A pesar de que los estudios se realizaron de manera paralela, mantienen puntos en común, como la falta de inspección de la estructura.