México, 4 de julio de 2022.- Kenia López, vicecoordinadora del PAN en el Senado, pidió al presidente Andrés Manuel López Obrador deje de ver como enemigos a quienes lo cuestionan por la construcción del Tren Maya o le piden que cambie su estrategia de seguridad que no funciona y, mejor reconozca sus errores.
La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos declaró que lo que pasa con el Tren Maya no tiene que ver con conservadores, sino con un ecocidio y en su necedad no abrió un diálogo con la población, con los expertos, con los ecologistas, con quienes saben cómo hacer una obra de esta magnitud sin violentar los ecosistemas.
Lamentó que el presidente siga ‘aneciado’ en esta obsesión de destruir el ecosistema y criticó que sólo le dé vuelta a la ley, simulando que la cumple.
También, la panista reprochó que el presidente se haya confrontado con las iglesias por la petición que le hicieron de cambiar la estrategia de seguridad, después del asesinato de dos sacerdotes jesuitas en la comunidad de Cerocahui, municipio de Urique, en Chihuahua.
“El problema del presidente es que solamente ve enemigos, el problema del presidente es que no reconoce sus errores. (…) El problema del presidente es que con esa cantaleta de los conservadores quiere justificar todos sus errores. (…) Quien se ha confrontado con las iglesias es el presidente López Obrador, quien ha violentado y denostado, incluso, a los sacerdotes, es el presidente López Obrador, se ha equivocado una vez más”.
Recordó que las iglesias, los sacerdotes, la comunidad jesuita en la mayoría de las ocasiones, son personas que han dejado de servirse asimismo para servir a los demás.
Insistió que el presidente se sigue equivocando y con tal de justificar su ineficiente estrategia de seguridad lastima a la jerarquía católica.
Dijo que López Obrador debe reconocer que su estrategia de seguridad no funciona y, que tiene ya a más de 120 mil mexicanos asesinados y que incluso a los sacerdotes en las iglesias el crimen organizado les está cobrando ‘derecho de piso’.
Reiteró que, en su necedad, el titular del Ejecutivo Federal está dejando en estado de indefensión a las y los mexicanos, a las iglesias y a los sacerdotes.
Sobre la presencia del embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, en la misa dominical, en la catedral metropolitana, es una muestra de que el gobierno de ese país respalda los sacerdotes de México, que “lamentable que el respaldo se tenga de gobiernos de afuera, pero no del presidente López Obrador”.
En otro tema, pidió al presidente dejar de pelearse con el gobierno de Estados Unidos, que es nuestro principal socio comercial, ahora por su declaración que se iniciará una campaña para que se desmonte la Estatua de la Libertad en Nueva York, si Julian Assange, fundador de WikiLeaks es condenado en Estados Unidos por espionaje.