Seúl, 11 de agosto de 2022 (Reuters).- El líder norcoreano, Kim Jong Un, declaró la victoria sobre el COVID-19 y su hermana indicó que él también contrajo el virus, al tiempo que prometió «represalias mortales» contra Corea del Sur, a la que el Norte culpa de causar el brote.
Kim ordenó el levantamiento de las máximas medidas antiepidémicas impuestas en mayo, aunque agregó que Corea del Norte debe mantener una «barrera antiepidémica fuerte como el acero e intensificar el trabajo antiepidémico hasta el final de la crisis sanitaria mundial», informó KCNA de Corea del Norte.
Corea del Norte nunca ha confirmado cuántas personas contrajeron COVID, aparentemente porque carece de los medios para realizar pruebas generalizadas.
En cambio, informó el número diario de pacientes con fiebre, un recuento que aumentó a unos 4,77 millones. Pero no ha registrado nuevos casos de este tipo desde el 29 de julio.
Kim hizo su declaración en un discurso el miércoles en una reunión sobre política de COVID con miles de funcionarios sin máscara sentados en el interior, según imágenes de las emisoras estatales.
La hermana de Kim, Kim Yo Jong, también se dirigió a la reunión y dijo que el joven líder había sufrido síntomas de fiebre, según KCNA, lo que indica por primera vez que probablemente estaba infectado con el virus.
“Aunque estaba gravemente enfermo con fiebre alta, no podía acostarse ni un momento pensando en las personas que tenía que cuidar hasta el final frente a la guerra antiepidémica”, dijo en declaraciones difundidas por Televisión estatal de Corea del Norte.