Cruzan Ucrania y Rusia acusaciones sobre explosión en represa Kajovka

Kiev, Ucrania, 6 de junio de 2023.- Moscú y Kiev se culparon mutuamente de ser responsables de la enorme brecha abierta en la represa de Kajovka, en la región de Jersón.

Los habitantes de la vecina ciudad del mismo nombre se dirigían a zonas elevadas a medida que subía el nivel del río Dniéper, contenido por el embalse y una central hidroeléctrica.

Según Kiev, «unas 16.000 personas se encuentran en zona crítica», amenazada de inundación. «Hasta ahora, 24 localidades en Ucrania han sido inundadas. El ministerio del Interior ya ha evacuado a unas mil personas. La evacuación continúa», dijo el ministro del Interior ucraniano, Igor Klymenko a la televisión ucraniana.

Por su parte, Moscú estimó que 14 localidades, en las que residen «más de 22.000 personas», se encuentran en situación de riesgo, si bien el panorama está «enteramente bajo control».

La represa de Kajovka y su central hidroeléctrica fueron tomadas por Rusia en las primeras horas del conflicto que empezó el año pasado.

El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, convocó una reunión de su Consejo de Seguridad Nacional por lo que calificó de «ataque terrorista» y su ministro de Exteriores, Dmytro Kuleba, pidió una reunión urgente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.

El jefe de la Unión Europea (UE) , Charles Michel, lo calificó de «crimen de guerra». Y el jefe de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo que la destrucción es «indignante» y «pone en peligro a miles de civiles y causa graves daños medioambientales».

Rusia, sin embargo, aseguró que la represa fue parcialmente destruida por «múltiples ataques» procedentes de las fuerzas ucranianas.

Según el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, la destrucción fue el resultado de un «sabotaje deliberado de la parte ucraniana».

La represa, construida en la era soviética, se asienta sobre el río Dniéper, que suministra agua de refrigeración a la central nuclear de Zaporiyia, ocupada por Rusia.

La inundación reavivó los temores por la seguridad de esta central, bajo control ruso, situada a unos 150 kilómetros de la represa. (Con información de DW)