México, 14 de febrero de 2024.- Al compás de la canción “Sabes una cosa”, del compositor Rubén Fuentes, interpretada por un mariachi, Ana Lilia Rivera, presidenta del Senado, celebró su cumpleaños en este Día del Amor y la Amistad.
La senadora de Morena fue agasajada con un megapastel, que compartió con el personal de limpieza de esta cámara.
La tlaxcalteca lloró de emoción, pues la fiesta fue sorpresa.
Para ella hubo porras, abrazos y regalos.
Antes de partir su pastel, la presidenta de la Cámara Alta, hizo uso de la palabra.
“Si algo tengo que decir, solamente es: Gracias, porque yo no soy más que nadie, tampoco soy menos que nadie, eso lo aprendí aquí.
En el 2007, tuvo un accidente muy grave con mi familia y cuando yo regresé de ese accidente, no me morí por muchas circunstancias. Cuando el médico me dio de alta me dijo: usted cree en Dios, sí y si no, búsquelo, porque usted tenía desde la cuatro y media de la tarde de este día que estar muerta y sobrevive hasta la una de la mañana con el bazo hecho pedazos y con el intestino hecho pedazos y está viva.
Cuando yo abrí su cuerpo, la cantidad de sangre en el cuerpo ya no era compatible con la vida. Yo he presenciado muchos milagros y cuando la operé a usted, yo sabía que usted estaba viva porque alguien no quiso que estuviera del otro lado.
Busqué para que se quedó a vivir, encuéntrele un objetivo a su vida, es lo que le puedo decir como hombre de ciencia que convive con la muerte y la vida todos los días.
A partir de ese día mi vida cambio, aprendí a ver todo lo bonito que hay, hasta donde no hay belleza. Aprendí que en todo lo malo, siempre hay algo bueno y aprendí que donde debemos estar, debe estar la bondad, la generosidad y el amor al prójimo. Así llegué al Senado, del origen humilde donde yo nací al lugar privilegiado en donde hoy estoy”.
En el espacio conocido como “La Cuña” fue la fiesta para celebrar el cumpleaños 51 de Ana Lilia Rivera.
Con globos adornaron el lugar y un letrero en color rosa con la leyenda: Feliz Cumpleaños.
Al lugar llegó acompañada de la senadora Malú Micher y del zacatecano José Narro, mientras el marichi entonaba las tradicionales “Mañanitas”.
Antes de partir el pastel, a la morenista le echaron una porra: “¡Chiquitibum a la bim bom ba… Ana Lilia, Ana Lilia, ra, ra, ra”.