World Central Kitchen detiene operaciones en Gaza tras la muerte de 7 de sus trabajadores

Deir Al-Balah, Franja de Gaza, 2 de abril (AP).- Un ataque aéreo israelí mató a siete trabajadores humanitarios de World Central Kitchen, lo que llevó a la organización benéfica a suspender el martes la entrega de ayuda alimentaria vital a Gaza, donde la ofensiva de Israel ha empujado a cientos de miles de palestinos al borde de la inanición.

Chipre, que ha desempeñado un papel clave en el tratar de establecer una ruta marítima para llevar alimentos al territorio, dijo que los barcos que llegaron recientemente estaban regresando, con unas 240 toneladas de ayuda no entregada.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, reconoció que las fuerzas del país habían llevado a cabo el “ataque involuntario” contra “personas inocentes de la Franja de Gaza”.

Dice que los funcionarios están investigando la huelga y que “harían todo lo posible para que esto no vuelva a suceder”.

Las imágenes mostraron los cuerpos, varios con ropa de protección con el logotipo de la organización benéfica, en un hospital de la ciudad de Deir al-Balah, en el centro de Gaza. Entre los muertos se encuentran tres ciudadanos británicos, un australiano, un polaco, un ciudadano estadounidense-canadiense y un palestino, según los registros del hospital.

World Central Kitchen, una organización benéfica de alimentos fundada por el famoso chef José Andrés, fue la clave de la ruta marítima recientemente abierta, que ofreció algo de esperanza para el norte de Gaza, donde las ONU dice que gran parte de la población está al borde del hambre, en gran medida aislada del resto del territorio por las fuerzas israelíes.

Andrés, cuya organización benéfica ha operado en varios países afectados por guerras o desastres naturales, incluido Israel después del ataque que desencadenó el conflicto actual, dijo que estaba “con el corazón roto” por la muerte de sus colegas.

“El gobierno israelí necesita detener este asesinato indiscriminado. Tiene que dejar de restringir la ayuda humanitaria, dejar de matar a civiles y trabajadores humanitarios, y dejar de usar los alimentos como arma”, escribió en X.

La organización benéfica dijo que el equipo viajaba en un convoy de tres coches que incluía dos vehículos blindados, y que sus movimientos habían sido coordinados con el ejército israelí.