Washington, 9 de mayo.- La DEA presentó este jueves su Evaluación Nacional de las Drogas 2024, en la que afirma que el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), tienen presencia en los 50 estados que conforman los Estados Unidos de Norteamérica.
Estos cárteles a quien la evaluación los clasifica como organizaciones criminales transnacionales, son las más poderosas y más peligrosas de México.
Tanto el Cártel de Sinaloa como el CJNG están involucrados en el tráfico de armas, lavado de dinero, tráfico de migrantes, tráfico sexual, sobornos, extorsión y otra serie de delito, con un alcance global y mercados en Europa África, Asia y Oceanía.
Según la evaluación estos cárteles tienen presencia en los 50 estados de Estados Unidos.
Aunque son más fuertes en los estados fronterizos, como Texas, Arizona, California y Nuevo México, así como en Florida, Nueva York y Washington DC.
Estos cárteles, según la DEA han desarrollado redes mundiales de cadenas de suministro. Dependen de empresas químicas de China, quienes les suministran los precursores químicos y las prensas de pastillas necesarios para fabricar las drogas.
En México “operan laboratorios clandestinos donde fabrican estas drogas y luego utilizan sus vastas redes de distribución para transportarlas a Estados Unidos. Cuentan con socios en Estados Unidos para distribuir las drogas al por menor en las calles y en las redes sociales”.
Según el reporte estas organizaciones de narcotraficantes utilizan cada vez más los sistemas bancarios clandestinos de China, como principal mecanismo de blanqueo de capitales.
En el caso del Cártel de Sinaloa que tiene 4 organizaciones que lo dirigen: “Los Chapitos”: Ivan y Alfredo Guzmán Salazar y Joaquín y Ovidio Guzmán López; Ismael “El Mayo” Zambada García, co-líder de la organización por tres décadas; Aureliano “El Guano” Guzmán Loera, Hernando de Joaquín “El Chapo” Guzmán y Rafael Caro Quintero, también opera en al menos 57 países del mundo.
