“Fue un acierto el poner los reflectores, lamparear el grave problema de la corrupción”: AMLO

México, 4 de junio.- El presidente Andrés Manuel López Obrador, afirmó que fue un acierto “lamparear” el grave problema de la corrupción, que era uno de los principales males de México.

López Obrador aseveró que la corrupción ha sido un obstáculo significativo para el desarrollo del país.

Reprochó que en el pasado la corrupción no era un tema prioritario en la agenda política y que incluso se llegó a considerar como parte de la cultura del pueblo mexicano.

Destacó que la corrupción era más prevalente en las élites y no en el pueblo, y que combatirla es esencial no solo por razones morales sino también por la eficiencia económica y política que un gobierno honesto puede lograr.

“Y creo que fue un acierto el poner los reflectores, lamparear el problema, grave problema de la corrupción, porque hay muchos grandes y graves problemas nacionales, pero el principal problema de México era la corrupción. Entonces, de manera deliberada, no se atendía, no se enfrentaba. Se llegó a decir que era parte de la cultura del pueblo de México. Una barbaridad, porque la mayor riqueza de México es la honestidad de su pueblo”.

Recordó que por la corrupción se acuñó la frase: “político, pobre, pobre político, que la moral era un árbol que daba moras y que servía para curar, nada más. Dí que el que no transaba, no avanzaba”.

Insistió que de este tema no se hablaba ni siquiera se trataba en la academia, en las universidades,
“no hay tesis sobre la corrupción, que era el principal problema de México. Ni se hablaba en el Parlamento, en el Congreso, ni se hablaba en el Poder Judicial y tampoco en el Ejecutivo y, nada dañó más a México que la deshonestidad de los gobernantes”.

Acusó que la corrupción dio al traste con todo, “esa fue la causa principal de la desigualdad social y de la desigualdad económica y, por la corrupción se agravó el problema de la pobreza, de la violencia, y no se atendía, no estaba en la agenda”.

Recordó que “nosotros pusimos el énfasis en combatir la corrupción y no sólo por razones de índole moral, que es importantísimo. ¿Para qué es un gobierno corrupto? Pues no tiene autoridad. Para nada. Y es sujeto, es presa fácil para el chantaje, para que lo sometan desde el extranjero”.

Insistió que la corrupción hay que combatirla no sólo por razones de índole moral, sino porque “es mucho lo que se va por el caño de la corrupción, lo que se iba por el caño de la corrupción”.

Resaltó que “cuando ya no hay esa corrupción y el ingreso, las riquezas de México, que son el fruto del trabajo de todos, el presupuesto se distribuye con justicia, alcanza a todos, pues entonces se ve que la corrupción es, pues no una pandemia, sino, como lo he dicho en otras ocasiones, una peste. Eso era lo que impedía que el país avanzara. Entonces, se termina con la corrupción en el Ejecutivo, de arriba para abajo. Se barre la corrupción, no se permite ni arriba ni abajo”.