París, 26 de julio (AP).- Debajo de los anillos olímpicos de la Torre Eiffel, Celine Dion mostró que ha vuelto a cantar después de un diagnóstico que amenazaba su carrera, mientras su voz se disparaba en «Hymn to Love» de Edith Piaf.
Mientras un pianista tocaba a su lado, Dion se acercó a la multitud reunida, que aplaudió su actuación estelar antes de que el monumento comenzara a brillar.
Fue una actuación impresionante para Dion, que canceló su gira mundial después de revelar su diagnóstico de síndrome de persona rígida. Es una afección neurológica rara que causa músculos rígidos y espasmos musculares dolorosos.
Regresó a la vanguardia olímpica casi tres décadas después de interpretar «El poder del sueño» durante la ceremonia de apertura en los Juegos de Atlanta de 1996.
Con la icónica Torre Eiffel como telón de fondo y envuelta en el estruendoso aplauso y los vítores del público, Celine Dion hizo su ansiado regreso a los escenarios durante los Juegos Olímpicos de París 2024.
Luego de cuatro años de ausencia debido a problemas de salud, la cantante volvió a brillar con su elegancia vocal, interpretando «Hymne à l’amour» de Édith Piaf bajo la lluvia, que simulaba un despliegue de destellos.
Ataviada en un deslumbrante vestido de Dior, adornado con miles de perlas y más de 500 metros de flecos, la artista se rodeó del resplandor de la ciudad anfitriona.
Frente a cientos de personas, la canadiense se mostró visiblemente conmovida al interactuar con su público, una de las cosas que más anhelaba, y su actuación no solo simbolizó su vuelta a la música, sino también el cumplimiento de un sueño personal, volver a ver la estructura de hierro más emblemática de la ciudad de las luces.
Su participación en la apertura de los Juegos Olímpicos París 2024, costó aproximadamente 2 millones de dólares, según reportó TMZ.
Se ha invertido una cuantiosa cantidad para asegurar que la cantante esté lo más cómoda posible, cubriendo costos de viajes, barcos, hospedaje y contando con el acompañamiento de su numerosa familia.
