México, 25 de octubre.- Rosario Piedra Ibarra, negó que en México existan las desapariciones forzadas, la tortura, la militarización, una crisis de derechos humanos y un fraude en su elección hace cinco años como presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Al comparecer ante las comisiones unidas de Derechos Humanos y Justicia del Senado, para buscar su reelección como ombdusperson, Piedra Ibarra ofreció “continuar al frente de la CNDH y así consolidar la transformación que se ha iniciado para servir mejor al pueblo”.
Prometió construir un nuevo modelo de defensa de los derechos humanos, que deje atrás la herencia neoliberal y ponga en el centro a las víctimas, que deje de ser una institución meramente testimonial, creada por Carlos Salinas, Jorge Carpizo y Fernando Gutiérrez Barrios.
Mencionó que esos eran tiempos en que los defensores de los derechos humanos, eran los mismos que los violentaban, “se archivaban las quejas, casi no se emitían recomendaciones y si lo hacían tardaban años en emitirlas, eso no pasa más, hoy la CNDH es otra”.
Explicó que “en la actual CNDH ya no existen torturadores, ¿saben quiénes eran los visitadores?, estaban integrados por agentes de la Dirección Federal de Seguridad (DFS), por expolicías, y entonces las víctimas eran atendidas por los mismos que las violentaban, eso es”.
La titular de la CNDH, aseguró que “no nos perdonan que no emitimos las acciones inconstitucionalidad ni las recomendaciones que hubieran querido contra la reforma judicial aunque no se tuviera instrumento legal para hacerlo”.
La senadora del PAN, Laura Esquivel, criticó a Piedra Ibarra.
“Lo que no perdonamos es el silencio que la Comisión ha guardo durante todos estos años. Desagraciadamente, hemos tenido una Comisión prácticamente inexistente, hoy que la crisis de derechos humanos es peor que nunca”.
La presidenta de la CNDH, negó que las desapariciones forzadas y la tortura persistan, y rechazó la existencia de una crisis de derechos humanos.
“Claro que ya no existen las ejecuciones extrajudiciales ni las desapariciones por parte del Estado, (…) quien eran el principal represor durante más de 70 años y a partir de los años ‘50, era el Estado mexicano, que creó policías anticonstitucionales, (…) y que eran llevados a prisiones clandestinas y sujetos a desaparición forzada. (…) Claro que hay asesinatos y hay muertes que se tienen que acabar, pero que son cometidas por grupos de la delincuencia organizada y no parte del Estado mexicano. (…) Es falso que en México exista una crisis de derechos humanos”.
Otro panista, Ricardo Anaya, acusó que su elección hace cinco años como presidenta de la CNDH, fue fraudulenta.
“Usted fue electa mediante un fraude, (…) me parece un poco sorprendente, engañoso, que habiendo esto sido materia de notas periodísticas en todos los medios de comunicación, hoy nos salga con que no recuerda el episodio. (…) Usted conscientemente asumió la presidencia de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos sabiendo que su elección, había sido una elección fraudulenta, entonces no tuvo usted legitimidad de origen. (…) No le da vergüenza venir a pedir el voto”.
Con un rostro enojado, Rosario Piedra reviró al panista:
“En primer lugar, decirle senador que no hubo fraude en esa elección, No hubo fraude, no recuerdo el número de votos, eso pregúntenselo a la Mesa Directiva. (…) La Ganhri que también nos tuvo que revisar, también reconoció que no había sido una elección fraudulenta. (…) Estoy diciendo la verdad, siempre digo la verdad. El león cree que todos son de su condición. Yo sí digo la verdad”.
Enseguida afirmó que “es falso que exista una militarización en este país. No vivimos un régimen militar, ¡perdón! Las Fuerzas Armadas dependen de un mando civil y cuando hubo aquí el uso indebido de las Fuerzas Armadas fue en el sexenio de Felipe Calderón, cuando el jefe Supremo de las Fuerzas Armadas, que era él, ordenó su guerra contra el narco. (…) Actualmente no existe militarización”.
La priísta Claudia Anaya le dejó la siguiente reflexión a la ombudsperson:
“Déjele el espacio a la presidenta Claudia Sheinbaum de tener una mejor acompañante en la Comisión de los Derechos Humanos. Si es por un sueldo, yo le regalo el mío…”.
Rosario Piedra, dijo que la CNDH “dejó de ser la institución nacional de derechos humanos más onerosa y menos productiva del mundo, como lo era antes de mi gestión. Hoy con menos aparato y menos presupuesto se trabaja en serio y los resultados son los mayores numéricamente en toda su historia”.
“La importancia que ahora hagamos más recomendaciones y atendamos más quejas, es porque atrás de esos elevados números hay víctimas, hay personas esperanzadas por encontrar justicia y respuesta a sus demandas, por eso puedo presentarme ante ustedes y ante las víctimas y ante el pueblo de México con la frente en alto y decirles que no aspiro a este puesto por mera ambición personal, sino que lo ve con medio necesario para consolidar lo logrado”, citó.
Acusó que a pesar de campañas mediáticas, “dimos pasos firmes para el establecimiento de un nuevo modelo de defensa, que privilegie las acciones de prevención y se enfoque en no solo recibir y atender quejas, sino en reducir las violaciones a derechos humanos”.
Negó que quiera desaparecer a la CNDH, sino transformarla, “desaparecer el coto de poder del Estado el aparato de simulación, creado por Carlos Salinas de Gortari, uno de los peores represores de este país y Fernandez Gutiérrez Barrios”.