México, 3 de enero.- Alejandro “Alito” Moreno, presidente del PRI e Ignacio Mier, vicecoordinador de Morena en el Senado, sostuvieron una esgrima de mensajes en redes sociales, para recordarse la frustración de uno por no ser gobernador de Puebla, y para que el otro no olvide el daño que en los últimos 30 años le causó el tricolor al país.
El senador priísta le recordó al político poblano que Morena está destruyendo al país, que “personajillos” como él son utilizados por el poder y le recomendó la lectura de “Los sueños rotos: Monólogos de un indignado”, de Marco Antonio de la Parra, para que recuerde por qué no fue gobernador de Puebla y por qué no lo será.
“Nachito, te recomiendo que leas “Los sueños rotos: Monólogos de un indignado”, de Marco Antonio de la Parra.
Así podrías comprender mejor por qué no fuiste gobernador. Explica cómo, en gobiernos populistas, personajillos como tú son solo utilizados por el poder. Aunque te duela, hay que recordarles que están destruyendo al país.
Disfruta la lectura @NachoMierV, porque gobernador no serás nunca. No seas ridículo”.
En respuesta, Ignacio Mier le recordó a “Alito” Moreno que tiene el hábito de regalar libros a sus amigos y conocidos, “procuro estén relacionados con su interés y circunstancia”.
Así, el vicecoordinador de Morena dijo que le enviará al presidente del PRI dos libros: Cien Años de Soledad de Gabriel García Márquez, y Eichmann in Jerusalem, a Report on the Banality of Evil de Hannah Arendt.
El primero, para que recuerde que lo más grave no es perder el sueño, es perder la memoria, y el segundo para que reflexione sobre la banalidad del mal.
“A propósito del PRI, de @alitomorenoc y sus frecuentes deposiciones verbales, voy a enviarle dos libros: Cien Años de Soledad, -Gabriel García Márquez, 1967-, acompañado de Eichmann in Jerusalem, a Report on the Banality of Evil -Hannah Arendt, 1963-.
Si llega a leerlos, confío que así será, sugiero en Cien Años de Soledad preste atención a la llegada de la peste del insomnio a Macondo y la manera práctica de curarlo. Lo más grave no es perder el sueño, es perder la memoria.
En la obra de Arendt, le recomiendo interiorizar en la desconcertante conclusión sobre la Banalidad del Mal.
Quizá después de su lectura comprenda que la historia de los últimos 30 años del PRI y sus dirigentes esta grabada con hisopos de tinta en la memoria de los mexicanos. Nada podrá borrar el daño que hicieron a México, así vivirán sus cien años de soledad”.