Bruselas, 21 de diciembre de 2017 (Notimex). – México y la Unión Europea continuarán negociando la modernización de su acuerdo comercial bilateral en enero, al no haber sido posible concluir el proceso en la ronda de negociación que se celebró esta semana en Bruselas.
Así lo anunciaron el secretario mexicano de Economía, Ildefonso Guajardo, y la comisaría europea de Comercio, Cecília Malmström, en una rueda de prensa conjunta, luego de cuatro días de intensas reuniones.
Ambos coincidieron que están “muy cerca” del acuerdo final, pero aún quedan cuestiones pendientes en temas como el modelo de protección de inversiones, el reconocimiento de denominaciones de origen, el acceso al mercado para productos agrícolas y las reglas de origen en manufacturados.
“Podemos ver el esqueleto de ese acuerdo. Sabemos cómo concluirlo, sabemos qué tenemos que hacer, pero necesitamos un poco más de tiempo. Estamos confiados en que podremos resolver todas las cuestiones pendientes en el inicio del año que viene”, dijo Malmström.
En materia de inversiones, Guajardo explicó que ya se ha acordado el concepto del nuevo acuerdo, pero México debe analizar “con mucho cuidado” cómo adaptar a su realidad el modelo propuesto por la UE y “elaborar las ideas que funcionarán para ambos lados”.
Lo mismo ocurre con el reconocimiento de denominaciones de origen, donde México busca proteger los quesos nacionales vendidos con nombres que en Europa son denominaciones de origen.
“México tiene un fuerte compromiso con las denominaciones de origen. El tequila mexicano es un muy buen ejemplo de cómo creemos en el poder de las denominaciones de origen. En economías emergentes, como México, tenemos que encontrar maneras de coexistencia entre los sistemas” de marcas y de indicaciones de origen”, señaló.
De las casi 400 denominaciones de origen que estaban en cuestión al inicio de las negociaciones, “apenas unas cuantas” siguen siendo objeto de discusión, destacó Malmström.
Guajardo también rechazó que las exigencias de Estados Unidos en la modernización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) tenga cualquier influencia en las conversaciones en curso con la UE.
“Estas negociaciones tratan de los intereses de México y de la UE”, aseveró.
El secretario señaló la importancia de haberse establecido un plazo para concluir las pláticas hasta el final del año, aunque ello no se pudo cumplir.
“Establecer un objetivo ayuda mucho a tener los equipos alineados y totalmente comprometidos. Creo que gracias a ese fuerte objetivo estamos muy cerca de concluir (las negociaciones)”, afirmó.
De acuerdo al secretario mexicano, la proximidad de las elecciones presidenciales en México, el próximo año, no afectará las negociaciones.
El gobierno considera “estratégicamente relevante mantener un buen ritmo” en todas las seis negociaciones comerciales que tiene actualmente abiertas para fortalecer su estrategia de diversificación.