México, 7 de febrero de 2018.- Un análisis del Centro de Estudios Internacionales Gilberto Bosques (CEIGB) del Senado, destaca que la rígida posición de los Estados Unidos adelanta una no fácil resolución de la renegociación del TLCAN en las rondas ulteriores.
En la nota de coyuntura “La sexta ronda de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN): ligeros avances pero sin acuerdo en temas contenciosos”, se señala que el balance mixto de la sexta ronda “por un lado, significó el primer avance tangible en materia de entregables luego de más de tres meses de impasse. Pero, por otro lado, los nulos avances en los temas más controversiales”.
La investigación apunta que las expectativas de la más reciente ronda de negociaciones eran altas, en vista de que el calendario original pactado por México, Estados Unidos y Canadá establecía siete rondas para todo el proceso.
Para cumplir con dicho calendario, habría sido “necesario alcanzar acuerdos sustanciales en varios de los temas más controversiales, en los cuales no se había registrado prácticamente ningún avance desde la cuarta ronda”.
En vista de las diferencias en las posiciones de negociación, el documento hace notar que después de los trabajos de la quinta ronda se pactó un periodo más largo entre rondas, al tiempo que se llevó a cabo en diciembre una reunión intermedia entre delegaciones técnicas de los tres países, en la cual se discutieron “los temas agrícolas, además de inversiones y compras de gobierno”.
A pesar de estos esfuerzos por propiciar acuerdos, los investigadores del CEIGB señalan que la visión generalizada de cara a la sexta ronda tendía hacia el pesimismo, e incluso anticipaba un posible anuncio del presidente Donald Trump para sacar a Estados Unidos del TLCAN. Estos presagios pesimistas parecieron reafirmarse después de que Donald Trump emitió un decreto mediante el cual se impusieron aranceles a las importaciones de lavadoras y páneles solares.
Sin embargo, el documento refiere que este humor pesimista comenzó a cambiar de sentido, después de que el mandatario estadounidense afirmó creer que ‘tenemos una buena oportunidad de llegar a un acuerdo”, durante su participación en el Foro Económico Mundial de Davos, Suiza.
“La coincidencia temporal de esta reunión con la ronda de Montreal significó, en los hechos, que los trabajos de renegociación del TLCAN se desarrollaron en dos carriles, en las mesas de los equipos técnicos y en los pasillos y salones de Davos”.
Desde el inicio de la sexta ronda, la investigación afirma que quedó claro que los temas más difíciles a discutir eran la cláusula de terminación, los mecanismos de resolución de controversias –específicamente el contemplado por el Capítulo 11 para disputas entre inversionistas y Estados – y las reglas de origen.
Al respecto, Canadá presentó formalmente propuestas para atender las preocupaciones de Estados Unidos.
De acuerdo con el documento, el principal avance registrado durante la más reciente ronda de negociación del TLCAN fue el cierre del capítulo sobre Medidas Anticorrupción.
Este capítulo se suma al de Pequeñas y Medianas Empresas (PYMES) y al de Competencia, así como ciertos contenidos en materia de energía también prácticamente cerrados.
Amén de que se trata de un tema en el que no se habían reportado diferencias mayores entre las partes, el acuerdo adquirió importancia simbólica después de dos rondas en las que no se había conseguido acuerdo alguno.
No obstante, los investigadores acotan que, para el 29 de enero, cuando se reunieron los tres ministros, “era claro que no se habían conseguido mayores avances con relación a los temas contenciosos”.
De hecho, parece que las diferencias entre Estados Unidos y Canadá permanecen, como lo muestra el hecho de que la conferencia de prensa conjunta estuvo marcada por el intercambio de recriminaciones entre la Canciller canadiense Chrystia Freeland y el representante Comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer.
La investigación concluye señalando el balance mixto de la ronda.
“Por un lado, significó el primer avance tangible en materia de entregables luego de más de tres meses de impasse. Por otro, los nulos avances en los temas más controversiales refleja una posición estadounidense rígida, lo cual no necesariamente adelanta una fácil resolución de este desafío en las rondas ulteriores.
Para conocer más sobre el proceso de renegociación del TLCAN y los resultados y avances derivados de la más reciente ronda de trabajo, lo invitamos a consultar la Nota de Coyuntura a la que hace referencia el presente Boletín en el siguiente enlace: http://centrogilbertobosques.senado.gob.mx/docs/NC_TLCAN_6taRonda_290118.pdf