México, 27 de abril de 208 (Notimex).- Uno de los días más esperados por los más pequeños, después de la llegada de los Reyes Magos y del Ratón de los Dientes es el Día del Niño, y la Ciudad de México ofrece un sin fin de actividades para todos los gustos y bolsillos, desde los parques de barrio hasta lugares para convivir con animales, o bien, simplemente jugar.
Así, hay opciones para que los chicos disfruten de ser chicos y los adultos recuerden cómo serlo; en la Ciudad de México existen dos de los más representativos parques de diversiones, que son la Feria de Chapultepec, ubicada en la segunda sección del bosque, cuyo costo de entrada va desde los 125 pesos, mientras que en Six Flags México, situado en la carretera Picacho Ajusco kilómetro 15, va desde los 499 a los 629 pesos.
Para los pequeños curiosos, los planetarios son otra manera de pasar el Día del Niño y el Planetario Joaquín Gallo, ubicado en en Parque de los Venados ofrece a los niños otra manera de mirar las estrellas; además, el Planetario Luis Enrique Erro, construído hace cuatro décadas, cuenta con un Domo de Inmersión para ver la actividad celeste en tiempo real, el costo de acceso es de 30 pesos.
El Universum, Museo de las Ciencias, cuenta también con el planetario José de la Herrán, el primero construído en la capital mexicana, para acceder es necesario cubrir el costo de entrada general que es de 70 pesos y abonar otros 10 más.
Este último lugar, ubicado en Ciudad Universitaria, el primero interactivo en la capital mexicana, cuenta con al menos unas 15 exposiciones permanentes, así como actividades diversas para los más pequeños.
Otros museos interactivos para el disfrute de los infantes en su día el Museo de la Luz, en el que por 40 pesos se exploran diferentes perspectivas para este fenómeno; además, el Papalote Museo del Niño con más de 300 exhibiciones divididas en cinco temas, el costo de entrada va desde los 200 pesos.
Para quienes disfrutan de la vida al aire libre y los placeres simples de la vida, los parques son una buena opción para celebrar, la capital cuenta con espacios tan particulares como el parque Masayoshi Ohira en la colonia Country Club Churubusco y que asemeja un jardín oriental; o bien, el Parque Lincoln, en Polanco donde es posible pilotear pequeños barcos a control remoto.
O bien, áreas verdes de gran extensión como el Parque Ecológico El Batán, en donde hay un aviario, áreas de juego y de comida, mientras que al norte de la ciudad el Parque Bicentenario ofrece distintos espacios de recreación, pistas de ciclismo y áreas de skateboard así como un impresionante jardín botánico.
En tanto que para estar cerca de la vida animal visitar alguno de los zoológicos de la capital es otra manera tener diversión para chicos y grandes; el de Los Coyotes ofrece la posibilidad de conocer especies de fauna silvestre nativas de la Cuenca del Valle de México.
A ese lugar, como al de San Juan de Aragón y Chapultepec, la entrada es gratuita, este último cuenta con más de 200 especies diferentes, entre las que destacan el lobo mexicano, el jaguar y el oso panda.
