Río de Janeiro, 17 de mayo de 2018 (Notimex).- El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, encarcelado desde el 7 de abril por corrupción, dijo que quiere ser candidato para sacar a Brasil del “desastre” en el que, a su juicio, está actualmente, según un artículo publicado en el diario francés Le Monde.
“Ya fui presidente y no estaba entre mis planes volver a ser candidato. Pero frente al desastre que se abate sobre el pueblo brasileños, mi candidatura es una propuesta para que Brasil reencuentre el camino de la inclusión social, del diálogo democrático, de la soberanía nacional y del crecimiento económico”, escribió Lula da Silva.
“Domino, con amplio margen, los estudios de intención de voto en Brasil, porque los brasileños saben que el país puede ir mejor”, agregó, en referencia a los sondeos de esta semana que dan cerca de un tercio del voto a Lula da Silva en los comicios de octubre.
Encarcelado hace más de seis semanas por una condena de 12 años y un mes por corrupción y lavado de dinero, y con media docena de causas pendientes de ser juzgadas, Lula da Silva dijo que es víctima de una “persecución judicial”.
En su artículo de este jueves en Le Monde, el exsindicalista brasileño es secundado por seis exlíderes europeos, que firman un texto –filtrado hace unos días a la prensa- en el que piden a Brasil que permita la participación de Lula da Silva en las elecciones.
El expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero, el francés François Hollande, los italianos Romano Prodi, Enrico Letta y Massimo d’Alema, así como el belga Elio di Rupo pidieron en el texto que Lula da Silva participe en los comicios por el bien del país sudamericano, a lo que la cancillería del gigante sudamericano reaccionó ayer con dureza.
Presidente de Brasil por dos mandatos (2003-2010), Lula da Silva fue condenado y encarcelado por beneficiarse de un departamento de tres plantas en la localidad costera de Guarujá, en el litoral de Sao Paulo, a cambio de favores políticos a la constructora OAS.
Candidato del Partido de los Trabajadores a las elecciones de octubre, las encuestas de esta semana señalan que, pese a llevar seis semanas encarcelado, sigue liderando la intención de voto con cerca del 32 por ciento de cara a un tercer mandato.
Sin embargo, no está claro si la Justicia le permitirá disputar la elección, ya que en Brasil los condenados por tribunales colegiados de segunda instancia –como es el caso de Lula da Silva- inhabilita a candidatos para cargos ejecutivos.