México, 27 de mayo de 2018 (Notimex).- Con el objetivo de mitigar el riesgo que representan las estructuras dañadas que dejó el sismo del pasado 19 de septiembre, la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse) de la Ciudad de México finalizó la demolición número 50, ubicada en el Eje 4 Sur Xola 32, colonia Álamos de la delegación Benito Juárez.
Estas labores, emprendidas desde hace ocho meses, buscan minimizar los riesgos para la ciudadanía y que la vida de las personas que habitan junto a un edificio afectado regrese a la normalidad lo antes posible.
Los inmuebles que han sido demolidos se ubicaban mayormente en las demarcaciones Cuauhtémoc, Coyoacán, Benito Juárez, Gustavo A. Madero, Miguel Hidalgo, Iztapalapa, Tlalpan y Venustiano Carranza.
Las 50 edificaciones suman un total de 100 mil 906 metros cuadrados de construcción, lo que equivale a tres veces los metros cuadrados de construcción con que cuenta la Torre Latinoamericana.
Asimismo, se han quitado un total de 312 niveles, que equivalen a 5.6 veces la Torre Mayor. Dichos inmuebles albergaban 629 departamentos, 48 despachos, 39 locales comerciales, 14 consultorios clínicos y seis casas.
Aunado a este esfuerzo, la dependencia capitalina ha participado con las secretarías de Gobierno y de Protección Civil y la Consejería Jurídica y de Servicios Legales de la Ciudad de México en la entrega de 23 predios limpios a sus propietarios, con el fin de que continúen con la fase de reconstrucción de sus viviendas.
El inmueble de Xola 32 estaba constituido por nueve niveles, constaba de 26 departamentos, un comercio y un estacionamiento.
El movimiento telúrico dañó sus columnas y muros, además presentó grietas diagonales, colapsos parciales, así como el desprendimiento de acabados hacia la vía pública.
Los primeros seis niveles se destruyeron manualmente y los últimos tres con el apoyo de dos retroexcavadoras, una para el retiro de estructura y la otra para el acarreo de escombro. Todas estas labores requirieron la asistencia de 24 personas y tuvieron una duración de tres meses.
Los últimos trabajos que se llevan a cabo en la zona es el retiro de material producto de la demolición, que suma mil 450 metros cúbicos de escombro. La Sobse sigue trabajando en cinco inmuebles más.
