De manera abrumadora vuelve ONU a condenar bloqueo de EU a Cuba

Naciones Unidas, 1 de noviembre de 2018 (Notimex).- El pleno de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) volvió a condenar de manera abrumadora el bloqueo que Estados Unidos ha mantenido contra Cuba durante casi 60 años, con 189 sufragios a favor de una resolución que urge a terminar el embargo.

La resolución, que este año cumplió 27 años consecutivos de ser votada y aprobada por la mayoría de la Asamblea General de la ONU, solo contó con los votos en contra de Estados Unidos e Israel, y con ninguna abstención.

El documento solicita a los Estados miembros de la ONU a que se abstengan de promulgar y aplicar leyes y medidas que vulneran la igualdad soberana de los Estados, la no intervención y no injerencia en sus asuntos internos y la libertad de comercio y navegación internacionales.

En su intervención ante la Asamblea General, el ministro de relaciones exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, indicó que el bloqueo constituye “una violación flagrante, masiva y sistemática de los derechos humanos de las cubanas y cubanos” y que ha impedido la prosperidad de los ciudadanos.

Señaló además que “el gobierno de Estados Unidos no tiene la menor autoridad moral para criticar a Cuba ni a nadie en materia de derechos humanos. Rechazamos la reiterada manipulación de éstos con fines políticos y los dobles raseros que le caracterizan”.

De acuerdo con el gobierno de Cuba, el bloqueo de Estados Unidos ha provocado daños a la economía de esa nación antillana por poco más de 134 billones de dólares a su valor actual. Solo en el último año, el bloqueo causó a Cuba pérdidas por cuatro mil 321 millones de dólares.

El gobierno cubano destaca que de haber obtenido ingresos por exportaciones de bienes y servicios, así como de haber eliminado costos por reubicación geográfica del comercio, el Producto Interno Bruto (PIB) de Cuba habría crecido a una tasa anual de 10 por ciento en promedio en la última década.

La sesión de este año fue caracterizada por el intento de Estados Unidos de incluir como parte de la resolución de condena al bloqueo una serie de enmiendas que apuntaba a criticar al gobierno de Cuba, todas las cuales fueron rechazadas por una mayoría de la Asamblea General.

Tales enmiendas criticaban la ausencia de independencia judicial, los arrestos y detenciones arbitrarias, la ausencia de mujeres en los cuerpos de decisión política, la prohibición del derecho de huelga y la negación de derechos y libertades civiles, políticas y económicas a los cubanos.

La representante permanente de Estados Unidos ante la ONU, Nikki Haley, comparó la situación en Cuba con lo que sucede en Irán, y calificó la aprobación de la resolución como una “pérdida de tiempo” que en nada cambia la situación del pueblo cubano.

Añadió que el pueblo cubano “fue abandonado otra vez por las Naciones Unidas y por la mayoría de los gobiernos”, pero Estados Unidos se manifiesta a su favor y lo respalda.