Guardia Nacional que quiere AMLO se asemeja a Guardia Bolivariana de Maduro

México, 11 de febrero de 2019.- Académicos y expertos afirmaron que la Guardia Nacional se asemeja a la Guardia Bolivariana de Venezuela y podría ser echada abajo en tribunales internacionales por su naturaleza militar.
Al participar en la audiencia pública “Constitucionalidad y Convencionalidad”, los especialistas coincidieron que la minuta que crea este nuevo cuerpo de seguridad es un “híbrido constitucional peligroso”, porque su operación recae en el ámbito castrense.

Sergio López Ayllón, director general del Centro Investigación y Docencia Económicas (CIDE), pidió a los senadores modificar la minuta, para que la Guardia Nacional sea un órgano civil, con un régimen transitorio y excepcional, porque en sus términos se declararía inconstitucional por violar la convencionalidad en materia de derechos humanos.

“El asunto podría llegar eventualmente a la Corte y es altamente probable que ese tribunal internacional declarará la inconvencionalidad del mando militar de la Guardia Nacional, podemos afirmar lo anterior, porque, aunque la Corte reconoce la facultad de los Estados para realizar acciones tendientes al mantenimiento de la seguridad, también se ha pronunciado enfáticamente sobre los riesgos que implica el uso de militares en tareas de seguridad pública. Su tesis es firme y consistente en el tiempo, el entrenamiento militar está dirigido a derrotar al enemigo y no a la protección y control de civiles”.

Álvaro Vizcaíno, ex titular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, aseveró que la Guardia Nacional que quiere el presidente Andrés Manuel López Obrador, se asemeja más a la Guardia Bolivariana de Nicolás Maduro.

“La propuesta que hoy hace el gobierno de México, se asemeja al modelo venezolano. (…) Una Guardia Nacional civil requiere no sólo mando civil, sino ADN civil y, sobre todo, requiere de una planeación y de un presupuesto que considere la construcción de una política pública de mediano y largo plazo, que no esté sujeta a subastas para conseguir recursos, sino a un presupuesto que refleje la importancia que el Estado mexicano da a la que se propone como la principal propuesta de seguridad del sexenio”.

Jan Jarab, representante en México del Alto Comisionado de Naciones Unidas en Materia de Derechos Humanos, pidió que la Guardia Nacional se someta a estrictos controles democráticos del orden civil.

“Eliminar los componentes castrenses del diseño de la Guardia Nacional. Su definición civil no debe ser desvirtuada, mucho menos, desmentida por los componentes del orden militar que existen en la minuta”.

El ex relator de la ONU en materia de Derechos Humanos, Santiago Corcuera Cabezut, se pronunció porque si se pretende restituir el artículo cuarto transitorio, se establezca con claridad cuánto tiempo permanecerán las Fuerzas Armadas subsidiando tareas de seguridad pública.

“Un artículo transitorio tiene que tener acotaciones clarísimas en cuanto a su transitoriedad. No una transitoriedad indefinida que produce indefinición, inseguridad jurídica y que la población por lo tanto no sabría a qué atenerse. (…) Yo con este transitorio no se a qué se puede atener la ciudadanía ni por cuánto tiempo la Fuerza Armada Permanente va a seguir en estas labores”.

Julio Sabines, maestro en Seguridad Nacional, defendió a la Guardia Nacional y descartó que su implementación vaya a militarizar al país.

“Quieren sugerir militarización, algunos. Pero, me pregunto cuántos miembros del gabinete son militares. Hoy, en Brasil dos terceras partes del gabinete, son militares en activo. Aquí, en México no lo veo así, el mando de la Guardia será civil, la Fiscalía es civil, el Poder Judicial es civil, ustedes legisladores son civiles, los gobiernos estatales son civiles, el país no está militarizándose”.

Las audiencias continuarán este martes, con la mesa titulada “Derechos Humanos”.