México, 23 agosto de 2019.- Un agente muerto y otros dos heridos fue el saldo de un ataque de miembros del Cártel del Noreste (CDN) contra policías estatales que dormían esta madrugada en un hotel de Nuevo Laredo usado como sede de los efectivos.
La Secretaría de Seguridad Pública de Tamaulipas informó que alrededor de las 2:45 horas, sujetos armados realizaron detonaciones contra las instalaciones del Hotel Teresa de este municipio, donde pernoctan Policías Estatales asignados a la seguridad en esa ciudad.
El hotel está ubicado sobre la avenida Reforma Cruz al cruce con Pedro Pérez Ibarra y Municipio Libre, en la Colonia Electricistas, a 24 minutos del Puente Internacional Uno.
Los primeros informes señalan que los agresores dispararon desde diversos puntos hacia las habitaciones donde se encontraban los policías, quienes repelieron el ataque.
«En una cobarde emboscada en #NLD, perdió la vida el policía Raúl M. y resultaron heridos otros valientes tamaulipecos. Este desenlace pudo haberse evitado. La Federación debe comprometerse con la seguridad. Es su responsabilidad. Mis condolencias a familia y compañeros», publicó el Gobernador Francisco García Cabeza de Vaca en su cuenta de Twitter.
Previo a este ataque, el miércoles el brazo armado del Cártel del Noreste, «Tropas del Infierno», atacó a policías estatales que instalaban un retén en la carretera a Piedras Negras, dejando heridos a los agentes María de los Ángeles Moreno Martínez, Gastón Martínez Téllez y José Alfredo Martínez Leija.
Ayer, apenas 24 horas después de ese ataque, aparecieron mantas en calles de Nuevo Laredo en las que el Cártel del Noreste amenazó con desafiantes mensajes a un supuesto nuevo mando de la Secretaría de Seguridad Pública de Nuevo Laredo.
También ayer por la tarde las autoridades ordenaron un traslado de reos del Penal de Nuevo Laredo, sin trascender a qué centro penitenciario los llevaron.
Los agentes de la Policía Estatal Acreditable están en alerta máxima por los últimos acontecimientos y han solicitado apoyo a los mandos para ser dotados de armamento de mayor calibre por la desventaja con la que enfrentan al cártel predominante en esa ciudad. (Con información de Reforma)