México, 02 octubre de 2019.- La Plaza de las Tres Culturas, en Tlatelolco se llenó como hace 51 años de miles de personas.
Vestidos de blanco, estudiantes, maestros, activistas y sociedad en general en un amplio contingente marchan hacia el Zócalo con la exigencia de paz y justicia.
«¡Dos de octubre no se olvida, es de lucha combativa!», es la frase que se escucha en gritos y la que se observa en pancartas portadas por los asistentes de la denominada marcha conmemorativa «La Memoria Florece».
Félix Hernández Gamundi, líder del Comité 68, comentó que se ha generado tanto «ruido» que espera que sea una gran movilización en la que no se tergiverse el sentido de la misma.
«En la medida que tienes una marcha grande, tienes generalmente marchas muy pacíficas porque la propia multitud hace el orden», planteó.
«A mí no se me escapa que ha habido una serie de declaraciones, por ejemplo, de dirigentes de comercios diciendo que se tienen que proteger y demás, la verdad es que no necesitan protegerse de nosotros, no necesitan protegerse de nada».
El líder también calificó como peligrosas la participación de servidores públicos en el denominado «cinturón de paz» que hará el Gobierno capitalino.
«Me parece un riesgo, son gente que en la eventualidad de un problema con grupos de provocación pueden ser las primeras víctimas», advirtió.
Las exigencias, apuntó el dirigente, siguen siendo las mismas: verdad, justicia y castigo a los responsables.
Para coordinar a los burócratas del «cinturón de paz», llegó el subsecretario de Gobierno de la Ciudad de México, Félix Medina Padilla, con su playera blanca de dicho contingente.
El funcionario aseguró que en la movilización que partirá de la Plaza de las Tres Culturas no se han observado a grupos de encapuchados.
El contingente avanza sobre el Eje Central Lázaro Cárdenas, donde también se escuchan porras de instituciones como la UNAM, el IPN, la UAM y la UACM.
Aunque organizadores pidieron que los participantes no se cubrieran el rostro ni portaran instrumentos que pudieran ser utilizados para atacar a personas o inmuebles, entre los asistentes se observan encapuchados.
El paso de la marcha que se dirige al Zócalo de la Ciudad de México está enmarcado por vallas metálicas o protecciones de madera en inmuebles.
En las azoteas o en los balcones, vecinos o trabajadores de la zona han salido a observar la movilización. Algunos saludan y otros gritan: «¡Justicia!».
Entre los participantes están miembros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), integrantes de gremios como el STUNAM y el SITUAM, y de organizaciones como Juventudes Marxistas y el Comité de Lucha Estudiantil del Politécnico.
También se movilizan el colectivo Comité General de Huelga Vive (CGH), organizaciones feministas, el Sindicato Mexicano de Electricistas, normalistas, miembros del Partido Comunista de México, de la Coordinadora Estudiantil Anarquista y la Federación Anarquista de México.
Frente a Palacio Nacional fue montado un templete en el que se prevé que se realice un mitin en el que participen voceros de diversas organizaciones.
De acuerdo con reportes policiacos, grupos de alumnos siguen partiendo de planteles universitarios como la Facultad de Filosofía y Letras, la Facultad de Economía, de la Torre de Rectoría de la UNAM y de los planteles Casco de Santo Tomás y Zacatenco del IPN.
La Calle Madero, donde hay diversos comercios, fue cerrada al público. Se espera que los manifestantes avancen por 5 de Mayo hasta la Plaza de la Constitución.
Para resguardar locales, con chalecos verdes y escudos, policías hacen guardia al paso de los manifestantes.
Según información de autoridades de la Ciudad de México, en el Primer Cuadro de la Capital fueron despegados 2 mil 500 elementos, y 380 unidades de seguridad.
Para atender cualquier eventualidad hay 13 ambulancias y 37 paramédicos en la zona. (Con información de Reforma)