Culiacán, 18 de octubre de 2019.- Unos 300 efectivos federales y militares de la Ciudad de México y la Tercera Región Militar con sede en Mazatlán, Sinaloa, fueron enviados a Culiacán, luego del operativo fallido para capturar a Ovidio Guzmán, hijo del capo Joaquín «El Chapo» Guzmán.
Los elementos arribaron para garantizar la seguridad de los ciudadanos, quienes vivieron tres horas de pánico durante las balaceras registradas este jueves tras el intento de detener a Guzmán, requerido por la justicia estadounidense.
Fuentes oficiales indicaron que la fuerza enviada no tiene instrucciones de confrontar a los integrantes del Cártel de Sinaloa, sino de implementar un cerco de seguridad en la ciudad para devolver la rutina a comercios y al transporte público.
A la capital de Sinaloa fueron enviados además alrededor de 40 vehículos militares, operativos y blindados, luego de que en las refriegas del jueves fueron quemadas ocho unidades castrenses.
Se indicó que las zonas habitacionales de los soldados también fueron reforzadas en su seguridad, luego de la incursión de sicarios del Cártel de Sinaloa quienes atacaron varias viviendas.
La Novena Zona Militar, en Culiacán, comandada por el General de Brigada Maximiliano Cruz, también fue cercada por los elementos castrenses, tras el envío de efectivos desde Mazatlán, donde se encuentra la sede de la Tercera Región Militar, encabezada por el General Divisionario Carlos Ramón Carrillo.
«A diferencia de las organizaciones criminales, nuestras fuerzas armadas y de seguridad pública tienen como prioridad a toda costa el resguardo y la protección de las vidas de la población civil, por lo tanto, en este Gobierno las Fuerzas Armadas y la Guardia Nacional no juegan con la vida de las personas inocentes», informó ayer el Secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval.
«Adicionalmente, también generado de esta actividad, vamos a reforzar con efectivos el Estado para seguir las operaciones que se han venido realizando en coordinación con Ejército, Guardia Nacional, Marina y Policías Estatales».
Alfonso Durazo, Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, indicó que una vez desactivado el operativo de ayer en contra de Ovidio Guzmán, regresó una relativa tranquilidad en la ciudad de Culiacán.
«Esperamos que el día de hoy (ayer) con un esfuerzo muy importante de todos los cuerpos de seguridad, federales, estatal y municipal podamos regresar la tranquilidad plena a la ciudad y que puedan desarrollar con toda normalidad las actividades cotidianas», externó Durazo.
«Empiezan ya a regularizarse algunas de ellas como el servicio bancario, y si bien están suspendidos algunos como el servicio de educación, esperamos también que esto de inmediato retorne a su normalidad. Esperamos que no haya riesgos fuera de lo común para la ciudadanía». (Con información de Reforma)