México, 12 de marzo de 2019.- La construcción de una refinería en Dos Bocas, Tabasco, uno de los proyectos emblemáticos del nuevo gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, fue puesta “en suspenso”, informó el subsecretario de Hacienda, Arturo Herrera, en declaraciones al diario Financial Times.
“El gobierno mexicano ha puesto en suspenso un polémico proyecto de refinería en un contexto de desaceleración del crecimiento económico y está preparando una nueva inyección de capital para impulsar la producción en Petróleos Mexicanos (Pemex), la compañía estatal de energía cargada de deudas, dijo Herrera el diario.
Los dos mil 500 millones de dólares asignados al proyecto serán empleados para dar vuelta a la caída de 15 años de Pemex en la producción, añadió Herrera.
Las afirmaciones del funcionario fueron desmentidas en la misma mañana de este martes por el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien en la conferencia de prensa matutina declaró: “No hay retraso. Estamos muy bien y se va a construir la refinería. Se va a terminar en tres años y va a costar entre seis mil millones y ocho mil millones de dólares”. Las bases de licitación, dijo el Presidente, serán anunciadas “muy probablemente” el 18 de marzo, cuando se conmemora la expropiación de la industria petrolera, decretara en 1938 por el presidente Lázaro Cárdenas.
El Financial Times publicó que el costo de Dos Bocas se ha revisado repetidamente al alza y la decisión sobre el proyecto “será bien recibida por los inversionistas, quienes temen que sea una carga que Pemex y México no puedan permitirse a medida que la economía se desacelera”. Las agencias de calificación se están volviendo cada vez más negativas para México debido a las frágiles finanzas de Pemex.
“No autorizaremos (la construcción) hasta que tengamos una cifra final que no sea muy diferente de los 8 mil millones de dólares originales”, afirmó Herrera, y agregó que la inversión planeada de este año en la refinería “puede ir a exploración y producción”.
Herrera hizo las declaraciones al Times durante un viaje a Londres, en el que se reunió con inversionistas, reportó el diario.
Para “muchos inversionistas”, aseguró el medio, el compromiso del presidente Andrés Manuel López Obrador de detener las lucrativas exportaciones de crudo en tres años y refinar el petróleo en el país para reducir la dependencia del combustible importado de Estados Unidos tiene poco sentido financiero.
“Es casi un acuerdo hecho que (la refinería) será cancelada”, sostuvo otro participante en las recientes reuniones de inversionistas con altos funcionarios del gobierno, quienes pidieron no ser identificados.
En febrero, el gobierno del presidente López Obrador presentó un paquete de ayuda financiera para Pemex por cinco mil 500 millones de dólares, incluida una capitalización de mil 300 millones, deducciones fiscales y ahorros esperados de una reducción del robo de combustible para aumentar la inversión en la compañía en 46 por ciento este año.
“Sabemos el tamaño (de la capitalización adicional planificada) pero no estamos listos para anunciarlo”, indicó Herrera a la publicación británica.
Herrera anunció que el gobierno estaba hablando con el FMI y otras organizaciones multilaterales sobre la estructuración de una nueva inyección de capital para Pemex. Dijo que las discusiones fueron técnicas y que no hubo préstamos.
Pemex tiene una deuda de 106 mil millones de dólares y enfrenta un oneroso calendario de pagos. Su capacidad de obtener ganancias se ve limitada por su carga fiscal: la compañía financia una quinta parte del presupuesto de México.
Herrera anunció que el gobierno presentaría un borrador de plan de negocios para la compañía en las próximas seis semanas aproximadamente, que coincidiría con las “necesidades y condiciones financieras con un plan de producción”. (Con Información de La Jornada)











