México, 24 de febrero de 2021 (The Guardian).- Una creciente disputa por un candidato a gobernador que enfrenta acusaciones de violación ha vuelto a enfrentar al presidente populista de México con activistas por los derechos de las mujeres.
Félix Salgado Macedonio se ha inscrito para postularse para gobernador en el estado sureño de Guerrero con el partido gobernante Morena, a pesar de las acusaciones de violencia sexual y violación por parte de cinco mujeres que datan de 1998.
Salgado ha permanecido en silencio mientras aumentaba la indignación por las acusaciones, aunque su abogado José Luis Gallegos insistió en que “no hay pruebas” y calificó las acusaciones como “historias de crímenes inventados”, según el diario Reforma. Salgado no ha sido acusado de ningún delito.
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha defendido tenazmente a Salgado incluso cuando aumentan las demandas para que el presidente lo deje como candidato. López Obrador inicialmente desestimó las denuncias por “politiquería” y luego alegó que los ataques a Salgado eran poco más que una artimaña contra el propio presidente, diciendo que era parte de una campaña de “linchamiento mediático”.
Las mujeres en México han respondido a la candidatura de Salgado – y la defensa de él por parte del presidente – con una campaña en las redes sociales, en la que publicaron fotos de ellas con carteles que decían “Presidente, rompa el pacto”, una referencia al machismo desenfrenado en la política mexicana.
“Esta es la oportunidad para que el presidente y Morena [el partido de López Obrador] demuestren que realmente son diferentes y tienen cierta decencia”, tuiteó la escritora Alma Delia Murillo, quien envió el hashtag #RompeElPacto como tendencia. “No pacte con el machismo avalando a un candidato como Félix Salgado”.
Amlo, como se conoce al presidente, recibió tales llamadas con el escueto comentario : «¡ Ya chole !» – «¡Ya basta!»
Más tarde dijo: “Me están vinculando con el caso Félix Salgado, y hay una campaña de linchamiento mediático en todos los programas de radio, toda la prensa contra Félix”.
El episodio ha vuelto a poner a Amlo en conflicto con los activistas por los derechos de las mujeres y el floreciente movimiento feminista del país .
A lo largo de su mandato, Amlo ha desestimado las protestas que piden acciones contra la plaga de feminicidios de México con burlas y acusaciones de conspiración. Ha afirmado sin pruebas que el movimiento de mujeres de México ha sido infiltrado por «conservadores» como un caballo de Troya para atacar su administración.
Su gobierno recortó drásticamente los fondos para programas y refugios para mujeres, incluso cuando la violencia doméstica aumentó en medio de los bloqueos por coronavirus.
“Amlo no tiene la agenda feminista”, dijo Bárbara González, analista política en Monterrey. “Para él, estas demandas son una distracción de su agenda. Es algo para élites, conservadores y personas que intentan obstaculizar sus planes «.
Sus planes incluyen retener el control del Congreso y arrasar en las elecciones para gobernador en casi la mitad de los 32 estados de México en las elecciones de mitad de período del 6 de junio. Morena, el partido fundado por Amlo en 2014, a menudo elige a sus candidatos mediante encuestas, aunque Amlo tiene la última palabra sobre las nominaciones, dijo González.
Salgado, un senador con licencia, lidera las encuestas en Guerrero, que se encuentra al sur de la Ciudad de México e incluye algunos de los municipios más marginados y violentos del país.
Apodado “El Toro”, Salgado fue alcalde de Acapulco entre 2006 y 2008, cuando la violencia de los carteles de la droga estalló en lo que alguna vez fue el abuelo de los destinos turísticos mexicanos. También tiene una larga historia de lealtad a Amlo, junto con redes de patrocinio en todo el estado, según los analistas.
Las mujeres de Morena han instado a Amlo a abandonar a Salgado y la comisión de honestidad y justicia del partido está investigando las acusaciones contra Salgado. Pero el presidente del partido Morena, Mario Delgado, ha dicho que Salgado puede postularse mientras no sea declarado culpable o sentenciado.
“Todo está hecho para que [Salgado] nunca sea sentenciado y, en realidad, casi ningún hombre es condenado por violencia sexual”, dijo Paola Zavala Saeb, abogada y directora de Ocupa México, una organización de prevención de la violencia. «Solo el 2% de las denuncias de violencia sexual terminan con una sentencia».
