Madrid, 19 de julio de 2018 (Notimex).- La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) presentó de manera oficial a Luis Enrique como nuevo director técnico de la selección nacional, desde la Ciudad del Futbol de Las Rozas.
Luego de las palabras del director deportivo de la selección española, José Francisco Molina, y con la presencia del presidente de la RFEF, Luis Rubiales, el nuevo seleccionador del país compareció ante los medios de comunicación que se dieron cita en el Salón Luis Aragonés, dentro del complejo deportivo.
«Siempre es muy agradable ver un repaso a mi carrera como profesional, como jugador de la selección… Debo agradecer al presidente, a la Junta Directiva, su confianza… Sé lo que significa ser seleccionador y estar en esta casa. Estoy muy ilusionado de afrontar este reto e intentar hacer lo mejor posible a la selección», dijo Luis Enrique al entrar en escena tras la exhibición de un video que rememoró su trayectoria.
El nacido en Gijón, Asturias, no dudó en externar la felicidad que le inundaba por ser el escogido para el proyecto de la selección española, del que se expresó con el mayor respeto y alabó las buenas cosas que dejaron Julen Lopetegui y luego Fernando Hierro, además de plantear que se debe trabajar de ahí para mejorar.
Al ser cuestionado por su método de trabajo, Luis Enrique comentó que es su filosofía el consensuar con sus jugadores, siempre teniendo en cuenta que la mente colectiva del conjunto es él, mientras que los jugadores tienen su visión individual, a lo que comentó no tener prisa y estudiar la situación, ya que se viene un recambio generacional importante.
«Implica una identificación clara con lo que representamos, jugar por nuestro país y defender en grandes citas a nuestra selección. Siempre he dicho que siempre me había apetecido ser seleccionador», dilucidó muy orgulloso de tener la oportunidad de representar al equipo nacional.
Sobre el estilo de juego de la selección, Luis Enrique detalló que vivió algo similar cuando tomó las riendas del FC Barcelona, en donde se vivía una época estéril, sin títulos a pesar de contar con una gran estilo de juego, por lo que sabe que se tiene que trabajar en el mismo esquema para evolucionar y perfeccionar los detalles.
«Sé lo que significa entrenar a alto nivel, y que cada uno tenga una opinión de ti. No soy anti-nada. Es un orgullo para mí ser seleccionador y voy a disfrutar de mi experiencia como lo hice siempre», acotó el extécnico culé.
